Si estás aquí, probablemente te estés preguntando sobre la cafetera francesa y cómo se usa. En Elektra, no solo nos encanta ofrecerte los mejores productos para tu hogar, sino también ayudarte a sacarles el máximo provecho. Así que, ¡vamos a ello!
Antes de sumergirnos en el cómo, hablemos un poco sobre el qué. La cafetera francesa, también conocida en algunos lugares como prensa francesa, es una máquina cafetera que ha ganado popularidad en los últimos años.
A diferencia de otros tipos de cafeteras, esta no utiliza electricidad ni filtros de papel. Su diseño sencillo y elegante la hace perfecta para aquellos que buscan un café con cuerpo y sabor auténtico.
Mide y muele el café: necesitarás café molido grueso. Si tienes granos enteros, muélelos hasta que tengan la consistencia de migas de pan gruesas.
Añade el café molido: dependiendo del tamaño de tu cafetera, la cantidad de café puede variar. Pero una buena regla general es usar una cucharada de café por cada 120 ml de agua.
Vierte agua caliente: el agua no debe estar hirviendo, pero sí bien caliente. Asegúrate de verterla de manera uniforme sobre el café.
Revuelve y espera: con una cuchara, revuelve suavemente el café y el agua. Luego, coloca la tapa de la cafetera y deja reposar durante 4 minutos.
Prensa y sirve: después de esperar, presiona lentamente el émbolo hacia abajo. ¡Voilà! Ahora puedes servir tu delicioso café.
Quizás te estés preguntando por qué deberías optar por una cafetera francesa cuando hay tantos tipos de cafeteras disponibles en el mercado.
Bueno, la respuesta es sencilla: la cafetera francesa te permite tener un control total sobre el proceso de elaboración, lo que significa que puedes ajustar el tiempo de infusión, la cantidad de café y la temperatura del agua a tu gusto. Además, su diseño sencillo y sin complicaciones la hace fácil de limpiar y mantener.
Usa agua fresca y pura: el agua es un componente esencial en la elaboración del café. Asegúrate de que esté libre de impurezas y a la temperatura adecuada.
Muele justo antes de preparar: el café recién molido siempre sabe mejor. Si puedes, invierte en un buen molinillo y disfruta de la diferencia.
Experimenta: la belleza de la cafetera francesa es que te permite experimentar. Ajusta las cantidades, los tiempos y encuentra tu combinación perfecta.
En Elektra, creemos que cada taza de café es una oportunidad para crear momentos felices. Ya sea que estés comenzando tu día o buscando un momento de relajación por la tarde, una buena taza de café puede hacer maravillas.
Ahora que sabes sobre la cafetera francesa y como se usa, pon en práctica estos consejos y estarás disfrutando de un café delicioso en poco tiempo. Y recuerda, en Elektra, siempre estamos aquí para ayudarte a crear esos momentos felices en tu hogar. ¡Disfruta de tu café!